La historia de la marca comienza en 1926, en Montblanc, Tarragona. Fue allí donde nació Josep Maria Sans Amill, el fundador de la compañía. En ese momento, Josep Maria se encontraba estudiando en Barcelona y apostó con sus compañeros que podría crear una máquina que uniera eslabones de forma automática. Paralelamente, el dueño de una panadería cercana le explicó que, durante el verano, cuando dejaba la puerta abierta para ventilar, se le llenaba el local de moscas. Fruto de estas dos circunstancias, se le ocurrió desarrollar las primeras cortinas de hierro para puertas, con la finalidad principal de evitar la entrada de moscas e insectos, que comenzaron a utilizarse en locales comerciales y en viviendas particulares de todo el Mediterráneo.
Décadas más tarde, su hijo, Josep Maria Sans Folch, tras una ardua investigación de la materia prima, diseñó nuevos eslabones y mejoró la técnica para trabajar con aluminio anodizado. Esto permitió crear una amplia gama de colores y la posibilidad de reproducir patrones y dibujos. Su mujer, Josefina Esplugas, fue clave en todo este desarrollo.
Con el cambio de siglo y tras un intenso trabajo de investigación y desarrollo, las cadenas de aluminio de Kriskadecor pasaron de hogares y comercios a grandes hoteles y edificios en todo el mundo. Uno de los primeros proyectos fue la Casa Camper de Barcelona, un hotel diseñado por Fernando Amat, destacado promotor del diseño catalán. A partir de ahí, marcas como Google, Martini, Kawasaki y Marriott, así como renombrados arquitectos y diseñadores como Philippe Starck, Patricia Urquiola y Kengo Kuma, han confiado en Kriskadecor para transformar sus proyectos, incluyendo la intervención arquitectónica en la Casa Batlló de Gaudí.
Actualmente, la compañía está liderada por la tercera generación de la familia Sans, que ha continuado con la estela de innovación familiar, desarrollando incluso una subdivisión de revestimientos de exterior con cadenas de aluminio, además de abrir una segunda sede en Estados Unidos.
Innovación, personalización, atención al cliente y diseño
Desde su creación los valores centrales de la empresa han sido la innovación, la personalización y la atención al cliente.
Kriskadecor crea proyectos totalmente personalizados con eslabones de aluminio para arquitectos y diseñadores, incluyendo separadores de espacio, paredes, techos, elementos de iluminación, revestimientos exteriores y estructuras especiales. La versatilidad del material permite personalizar instalaciones en color, forma y dimensiones.
Las cadenas de aluminio son un lienzo en blanco para interioristas y arquitectos. Y, gracias a los numerosos procesos de innovación que han ido incorporando a lo largo de su historia, Kriskadecor ha desarrollado nuevas tecnologías que, hoy en día, permiten ofrecer un amplio abanico de aplicaciones: desde grandes superficies monocromáticas, hasta diseños que incluyen la reproducción de cualquier tipo de imagen o patrón.
Asimismo, la oficina técnica acompaña al cliente durante todo el proceso para asegurar que su idea obtenga el mejor resultado. El espíritu del abuelo y fundador, Josep Maria Sans Amill, permanece. Como él mismo solía decir: “No hay nada que no se pueda hacer, solo hay que encontrar la manera”.Desde 2014 la empresa comenzó su relación con diseñadores externos, concretamente con Claire Davies, para estrechar lazos con el mundo del diseño. Paulatinamente se han ido incorporado a su catálogo de productos creaciones de diseñadores como José Manuel Ferrero de estudi{H}ac, UON Studio, Luis Eslava, Yonoh y Crea Product Design.
“Consideramos importante seguir en esta línea ya que estas colaboraciones inspiran nuevos productos y patrones para futuros proyectos, además de proporcionar una poderosa combinación de visibilidad, prestigio, innovación, calidad y diferenciación, lo que en última instancia puede contribuir a un mayor éxito comercial y una posición fortalecida en el mercado.” Señalan fuentes de la compañía.
Best Sellers y ultimas colecciones
Sus productos estrella son las instalaciones de techos, que permiten crear todo tipo de formas y texturas. Desde elegantes ondas y estructuras paralelas hasta sorprendentes figuras artísticas y volúmenes que transforman cualquier espacio. Incluso pueden recrear el efecto de la lluvia, ofreciendo una experiencia visual única.
En cuanto a sus colecciones más recientes, destaca WEAVING, lanzada en la última edición de Salone del Mobile Milano. El apasionante mundo de los tejidos y sus métodos de producción son el punto de partida de esta colección creada por José Manuel Ferrero de estudi{H}ac. En ella se sintetiza los diferentes métodos de entrelazar hilos en 14 diseños, usando un sistema de píxeles a diferentes escalas para crear efectos ópticos tridimensionales que interactúan con la luz, el color y los acabados de los eslabones.
Comercialización
La comercialización de Kriskadecor se hace principalmente desde la sede central de Montblanc, pero se completa con una red de ventas compuesta por agentes y distribuidores exclusivos repartidos por todos los países y continentes.
Asimismo, forma parte de plataformas digitales como Archiproducts, ArchDaily y Material Bank, que han sido fundamentales para llegar a todos los rincones del mundo.
Además, para los prescriptores interesados en sus cadenas, ofrecen potentes herramientas de diseño como archivos 2D y 3D, CADs, BIMs y diferentes texturas, que permiten integrar estas piezas de manera impecable en sus renders.
Internacionalización
Kriskadecor exporta el 86% de la producción a más de 90 países, lo que les ha permitido adaptarse a diversos escenarios y culturas. Sus principales mercados fuera de España son: Estados Unidos, Alemania, Australia, Italia, Reino Unido, Suiza, Francia y Emiratos Árabes Unidos. Además, están buscando expandirse en países como Japón, Arabia Saudí y México. La empresa cuenta con una filial en Miami (EEUU).
Las cortinas de aluminio las encontramos en múltiples proyectos de todo el mundo. Entre ellos el techo del Westfield Mall of the Netherlands, el centro comercial más grande de los Países Bajos, con un total de 30 cortinas curvas que imitan el movimiento del aire y proporcionan calidez al Dining Plaza. Para el proyecto fueron necesarios 3020 m2 de cadena, cantidad equivalente a 235.000 metros lineales, o lo que es lo mismo, 235 km que podrían cubrir todo el territorio de los Países Bajos de punta a punta.
Otro techo de grandes dimensiones es el del Estadio Swansea Arena en Gales, Reino Unido. Hecho a medida e inspirado en los tutús de balé, reflejando lo etéreo de su naturaleza. Al igual que el tul de la indumentaria de las bailarinas, el techo de Kriskadecor es traslúcido, ligero y vaporoso. Para llevarlo a cabo fueron necesarios 1647 m2 de cadena.
En América, en el aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago de Chile, la nueva Sala VIP de LATAM Airlines incluye una gran estructura de tres cilindros concéntricos de altura variable que flotan por encima de la barra del bar. Y, junto a la zona de restauración, nos encontramos con dos pérgolas embellecidas con una cubierta de prismas hexagonales, algunos de ellos concéntricos, que unifican el espacio y generan una sensación envolvente.
Destacar también el revestimiento de exterior de la residencia de estudiantes ANÉMONE del grupo Kley en Montpellier, Francia, de 10 plantas. Con el fin de evitar la huella de carbono generada durante la construcción de revestimientos masivos, todo el edificio está envuelto con una doble piel de cadenas de aluminio. A la vez que tamizan la luz solar, las cadenas de eslabones proporcionan un filtro intimista que protege de las vistas directas desde el espacio público.
Y próximamente verá la luz la renovación del Duty Free Heinemann en las terminales 2 y 3 del aeropuerto de Sídney, Australia. Este nuevo entorno comercial será luminoso, casual y relajado, con un diseño que juega con los reflejos y la transparencia. Las líneas orgánicas guiarán al comprador en su viaje de compras, ofreciéndole una experiencia fluida y envolvente. Para ello, han sido necesarios 1128 m2 de cadena, 500 m2 para los laterales del hall de la terminal 2 y 628 para el techo de la terminal 3.
