“Nuestra responsabilidad es trabajar para hacer sostenible la producción industrial respetando el medioambiente; la tuya, exigir cada día más y elegir en consecuencia”. Con esta frase, directa y rotunda, se define Actiu; toda una declaración de principios de una compañía de origen familiar y proyección mundial.
Fundada por Vicente Berbegal en 1968 como un pequeño taller en el que fabricaba muebles por encargo, el buen hacer de su creador valió su consolidación como fabricante de mobiliario de hogar. En los años 80 se puede decir que Actiu tuvo una “visión”: descubrió un nicho de mercado en el por entonces incipiente mundo de la informática. Desde ese momento, no ha dejado de crecer y de diversificarse, produciendo muebles para todo tipo de espacios colectivos y abriéndose al mundo entero.
Actiu es hoy un referente para las empresas de su sector, no sólo por sus éxitos sino por el modo de cosecharlos. Todos sus procesos son de producción propia, desde la mecanización de la madera, el metal o la matricería hasta la aplicación de acabados.
A lo largo de sus 40 años Actiu ha lanzado al mercado decenas de productos que se pueden encontrar en oficinas, salas de espera, terminales de transporte, centros de conferencias, hospitales… En números anteriores hemos reseñado piezas como su estilizada estantería Level, la bancada Passport o la silla Winner, y proyectos como el amueblamiento de las oficinas de la empresa mexicana Tiba. En la galería de imágenes mostramos algunos de sus proyectos más representativos, caracterizados tanto por la funcionalidad como por un diseño vanguardista: no en vano Actiu colabora frecuentemente con diseñadores externos, como alegreindustrial, Javier Cuñado, CDN, Lledó y Campos ó Sigfrido Bilbao.
Un parque para el futuro
Otro de los hitos de la compañía fue la apertura en 2008 de un Parque Tecnológico de casi 200.000m2 ubicado en Castalla (Alicante). Diseñado por el arquitecto Jose María Tomás Llavador, se trata de un complejo de edificios con oficinas, áreas logísticas, naves productivas y zonas verdes, pensado como un edificio amable con sus trabajadores y respetuoso con el medio ambiente.
El diseño de este parque tecnológico conjuga vanguardia, funcionalidad y sostenibilidad: un espacio abierto a la luz natural y autosuficiente tanto hídrica como energéticamente, al contar con la instalación de plantas solares fotovoltaicas en sus tejados. Este edificio consiguió, en octubre de este año, el certificado LEED®, un reconocimiento desarrollado por el U.S. Green Building Council, que reconoce la adopción global de prácticas de desarrollo de la construcción ecológica y sostenible.
En palabras del presidente de la compañía, Vicente Berbegal, la inversión en estos momentos de incertidumbre no debe verse como un riesgo sino al contrario, como una oportunidad: “la sostenibilidad es una apuesta por la eficiencia, por el ahorro, por hacer mejor las cosas”. En este sentido, el parque tecnológico les ha permitido ampliar su capacidad productiva en un 30%.
Actiu hace de su amplia relación de certificaciones ambientales y etiquetas ecológicas un valor añadido para sus clientes, a quienes garantiza un rendimiento medioambiental máximo en todos sus procesos; entre ello, la garantía del origen sostenible de la madera que emplea.
Hoy Actiu emplea a 200 trabajadores y genera otros 500 empleos indirectos. Cerca del 30% de sus ventas proceden de los más de 60 mercados internacionales en los que está presente. Cuando a Vicente Berbegal se le pregunta por el futuro, se recibe una inyección de optimismo: “seguir disfrutando del compromiso que hemos adquirido, del respeto, del progreso y de la innovación”.